Mi garganta

A través de todos estos años puedo decir que he sido bastante resistente físicamente a enfermedades y heridas y cosicas malas que hacen pupa. Una vez hechas, dale un par de días y estarán curadas. Dale otro par de días más y ni me acordaré de ellas. Solo hay una parte de mi cuerpo que se salva de esta norma: mi garganta.

Imaginen que voy a una fiesta. Sí, bueno, para eso hay que imaginar mucho pero imagínenselo de todas formas. Una fiesta con la música alta. O una con un karaoke de por medio. En ambas fiestas está garantizado que mi garganta sufrirá. Al día siguiente me levantaré con picor de garganta, con la voz tomada y unas ganas irrefrenables de tomarme alguna pastilla contra estos síntomas. Si siguiésemos la regla del resto del cuerpo, esos síntomas deberían irse a la mañana siguiente o dentro de dos. Pero recuerden: esto es la garganta. Aquí no hay regla que valga.

Lo que me espera es un mínimo de una semana con la garganta picándome, con unas ganas impresionantes de toser (y no quiero toser porque sé, y es que lo sé, que es una tos seca que hará que la garganta se me ponga peor) y hablando como El Padrino. Y es entonces cuando mi madre, viendo que no se me quita, me llevará al médico. Y el médico me mandará un jarabe que hará que en dos o tres días la garganta vuelva a ser la que era. Y yo diré “A ver si para la próxima me acuerdo del nombre del jarabe, así pasamos de pastillas y vamos directamente a lo que funciona”. Pero al final se me olvidará y un par de meses después volveremos a repetir todo el proceso.

Lo peor de todo esto es que, durante la semana dichosa, no hablo para que la garganta no vaya a peor. ¿Saben lo que es ser yo y no poder hablar en una semana? ¡Maldita sea, estoy que me subo por las paredes! Y no solamente yo. Porque en mi casa vivimos solamente mi señora madre y yo. No hay nadie con quién mi madre pueda hablar. Bueno, sí, está mi perra. Pero esa no contesta. Esa está como yo pero de por vida. Algún consuelo tendría que haber.

Echo cuentas y llevo ya una semana con la garganta jodía. Mañana pediré cita para el médico. A ver si tenemos suerte y nos lo dan para el miércoles. Seguiremos informando por aquí o por twitter. ¡Nos vemos!


~ domingo, 15 de agosto de 2010 1 comentarios